Casa Mancini es una vivienda muy especial que se ve fragmentada por muros de hormigón visto, transversales al eje longitudinal de la misma, y que dotan de carácter y contundencia a esta edificación que tanto se aleja de lo común.
La rotundidad de esta arquitectura, ejecutada en hormigón visto se ve suavizada por la integración de vegetación que cae por su fachada y que endulza y dota de vida a la misma.
Nuestro cliente buscaba una vivienda única que se diferencia de las demás que podemos ver en la costa mediterránea y con un mantenimiento mínimo que alargue la vida de su vivienda. Los muros de hormigón visto no solo trabajan como elemento estructural, sino que también, enriquecen su fachada con una textura a base de tablas de madera, aunando en un mismo proyecto y con un mismo material, técnica y estética.
Su interior, de estilo contemporáneo y con grandes espacios abiertos que permiten la conexión visual entre ellos, ha sido trabajado para resolver todas las necesidades de nuestro cliente con una distribución en dos plantas de gran valor estético y funcional.
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